cecilia marticorena zilleruelo Improvisada Escritora, Fotógrafa y Constructora de Magia
miércoles, 29 de julio de 2009
Camisa con aldaba.
miércoles, 22 de julio de 2009
Mi juego
por desobedientes senderos
sábado, 18 de julio de 2009
De mi parte más…
Hacendado de mi lado más profundo
Terrateniente de mi querencia
Comprador de mi ardor
Cacique de mi parte más amable
Empresario de mi lado incorrecto
Patrono de mi lado más sediento
Fanático de mí arrojo
Heredero de mi sonrisa
Casero de mis besos
Timonel de mi futuro
Dirigente de mi lado insurgente
Adquirente de mi parte de adelante
Patrón de mi arrebato
Piloto de mis ojos
Ideólogo de mi parte más...
mi respuesta a Calamaro
viernes, 10 de julio de 2009
Despistada omisión
con desconocida ingratitud
y con indiferencia postergada.
Evocando recuerdos.
Despistando tatuadas huellas
que desconoció omisiones.
Que a besos arrinconó
en un desatendido exilio.
De Abandonadas caricias.
De manos descuidadas
indolentes a desacertadas tareas.
A omitidos encontronazos
desagradecido y negado desprecio
a tanto amor y benevolencia despistada.
Caricias relegadas a desconocidos rincones
donde el desuso desatiende el juicio.
Porque la deducción es signo de torpeza
en el dilema de la imprudente cabeza.
Que la amnesia con desmesurado extravío
ha enfermado al amante exiliado.
Que el destierro pierda la desazón
y la agitación descuide el delirio.
Cecilia Marticorena Z
Julio,2009.
lunes, 6 de julio de 2009
Desasosiego.
Le propongo un romance de aventuras
con desasosiego y confusión.
Sin el malestar de la pesadilla
y con la intranquilidad del reposo.
Sin el resquemor de galanteos.
Con el anhelo impaciente
de la osada espera.
Cual poesía barata
de poema trasnochado.
Con la zozobra de lanzarse
a la aventura seductora.
Sin remordimientos ni aprietos
que de eso me encargo yo,
a probar tan agitado asunto
paladeando lo ilegal y lo ilícito.
Arriesgando la razón y la cordura.
Exponiendo la afanosa incomodidad.
Sin que cause disgusto el devaneo
y que la sosiega seducción
nos empape de impaciencia.
domingo, 5 de julio de 2009
Ladrona.
De tu apego me apropié
y como una bandida timadora
a tu pasión estafé
aunque saqueaste mi dignidad
con idolatría de usurero
de mi afición por ti me despojé,
y tu afán de salteador
desvalijó mi ternura y mi debilidad.
Como ratero hurtaste
mi débil filantropía,
como delincuente
burlaste la ley
al más preciado flechazo,
entonces ninguna humanidad resiste
el despojo al limpiar la razón.
Aunque malhechores ambos hemos sido,
tu como cuatrero, yo como carterista
tanta ha sido la cleptomanía de afición infinita
cual bandidos de sádicos enamoramientos
que a la ley clamo usurera justicia,
aunque en tus ojos maldad no vi,
aunque los míos con predilecta afición por los tuyos
sustraje la mirada de tu corazón,
y entre saqueos mutuos de sisados apegos
no habrá corte que nos juzgue tanta adoración.