Porque te encontró divagando
después que le arremangaste la falda a la luna,
y por tu respirar advirtió que de tu boca,
(que tenía aroma a mentira)
brotó uno de tus tantos nombres.
Entonces ella dijo que no se acordaba si tenía marido,
y que no te fueras a enamorar,
ya que al amanecer debías marcharte…
y que en la noche caben todos los besos
porque en el día se esfuman
al vapor de tanto sudor humano
al vapor de tanto sudor humano
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