sábado, 19 de enero de 2013

Amarillo por la ruta


Si mis ramas delgadas son similares a un junco, mis hojas escasas y pequeñas, no es casualidad que la naturaleza me haya creado así. Ya los griegos sabían de mi fama textil y me empleaban para hacer ataduras.

En los jardines me destaco por mi forma y olor y deben podarme a principios de primavera, y así mis flores de amarillo dorado brotarán en hermosos verano, hasta que el otoño me avise su llegada. También soy usada en paisajes y orillas de carreteras o caminos vecinales, siendo la admiración de los transeúntes.

Mi fruto es como una legumbre plana y oscura, tengo propiedades diuréticas, de mis flores se extrae colorante amarillo y de mis fibras se fabrican canastos y escobas.


1 comentario:

  1. Contrapunto,

    Soy la planta genista de los Plantagenet y algun monarca galo me tuvo como emblema. Allá ellos con sus cetros y coronas, a mi eso qué me importa.
    Yo muero y vivo con mi hermano el junco y desde mi terruño seco y arenoso lloro con él cuando lo cortan y separan de su lecho pantanoso. Después cuando mi hermano ya es flauta, canto con él la canción que él me enseñó y confundidos los dos en ese ney eterno y melancólico, gozamos la intimidad del amor ... hasta el punto de la aniquilación.

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